Nuestros cuidados en tiempos de crisis
Columna de Fátima Santana Iñesta, psicóloga del Centro Sanitario de Psicología Azahar de Llerena
En tiempos de cuarentena no hay mejor opción para la mente que estar ocupados. Conocemos cuándo empezó esto, pero aún no se sabe a ciencia cierta cuándo acabará.
Tenemos mucho miedo por saber qué va a pasar. El mejor antídoto es pensar en el presente y controlar todo lo que dependa de nosotros. Los días se nos hacen eternos y si dejamos a nuestra mente pensar libremente aparecen mensajes negativos e incluso llegamos a realizar conductas inapropiadas.
Nuestro cerebro funciona de esta manera porque nuestra mente se prepara para lo peor, es lo que le hemos enseñado a lo largo de la historia para sobrevivir. La mayoría de las personas pasan por este pensamiento por dos razones: la primera por ser algo nuevo que genera incertidumbre y la segunda, por no saber parar, y cuando lo hacemos, nos preguntamos ¿y ahora qué?.
Por otra parte, el hecho de que nos prohíban hacer algo nos lleva a que aún lo deseemos más, y ese deseo es el que debemos controlar, ya que puede provocar malestar. Es muy común que a lo largo de este paréntesis de vida aparezca un poco de ansiedad y podemos prevenirla o controlarla con hábitos saludables:
1. Es importante hablar del tema, pero de manera controlada. Es bueno expresar nuestras emociones, desfogarnos durante unos minutos con familiares y amigos y después cambiar de tercio. La ansiedad y el humor nunca se han llevado muy bien, por eso es bueno compartir alguna broma para desestresar. No hay que olvidarse de retomar relaciones sociales que estábamos perdiendo para sobrellevar estos días, algo que sirve para desconectar y conectar a la misma vez.
2. El cuidado personal hay que llevarlo como siempre. Es vital hacer una misma rutina, ya que, si nos vamos dejando, puede que la ansiedad aumente y esto nos haría sentirnos cada vez peor. Esto se puede extrapolar a las rutinas, y mantenerlas, llevando un horario fijo con las comidas, horas de sueño y ducha.
3. A la hora de comer hay que llevar una alimentación saludable y nutritiva. Cuando vamos al supermercado hay que llevar una buena lista. Desde la parte psiconutricional ya se ha comprobado que si vamos sin lista y vamos cogiendo lo que nos apetece se cogen muchas cosas que no necesitamos, comprando un exceso de alimentos innecesarios que harán sentirnos peor.
4. Hay que hacer deporte y estructurarlo. Hay personas que normalmente no hacen deporte y ahora que tenemos un poco más de tiempo se están incorporando a este hábito que nos mantiene en buena forma física. Ocupamos parte del día, descargamos y disminuimos pensamientos irracionales.
5. Improvisar. No hacer nada o hacer lo que surja. También es bueno dejar espacio para el descanso o la creatividad.
6. Cuidar los cinco sentidos para aumentar nuestro bienestar: oler algo que nos agrade, ver una buena película o limitarnos a observar, saborear alguna comida con atención, tocar algo suave y escuchar buena música o incluso el silencio.
Y algo importante: evitar adelantarnos a los acontecimientos. Solo controlamos lo que uno HACE, PIENSA Y SIENTE.
Valoremos las pequeñas cosas, descubrámonos, démonos valor, busquemos una motivación que nos haga ilusionarnos y después, mantengamos todo lo experimentado, porque esta situación…. acabará.
Busquemos el equilibrio.
Para lo que necesitéis, aquí estamos.
Mucho ánimo Llerena.
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.