La estrategia del líder de Segunda golpea al Llerenense

Dos acciones prácticamente calcadas a balón parado y convertidas por defensas incorporados al remate desde atrás determinaron la clasificación copera del Leganés, líder de Segunda, contra el Llerenense en Don Benito (0-2).

El equipo pacense no le perdió la cara a la eliminatoria, entró con ganas al partido e intentó sin complejos imponer un ritmo bajo al duelo para acercarse, en medida de lo posible, al Leganés, que tampoco tuvo complejos en adaptarse a la velocidad ramplona del juego para correr pocos riesgos sobre el maltrecho césped del Vicente Sanz. El primer acercamiento del encuentro le correspondió al cuadro madrileño por mediación de Ureña, que buscó generar peligro con un centro envenenado que acabó besando el lateral de la red. A ello respondió el equipo extremeño por medio de una acción clamorosa de gol de Platero, que no logró acertar solo ante el portero en el minuto 7.

Sin embargo, dos minutos después, el favorito de la eliminatoria tomó ventaja. Una falta colgada al área desde el perfil izquierdo por Djouahra, especialista a balón parado, la remató el lateral Nyom a la red con una acrobacia de espaldas, en una posición muy rigurosa y protestada por la grada y el banquillo llerenense.

No tardó en reaccionar el equipo dirigido por Luismi Álvarez, que encontró en Platero a su principal opción de generar peligro. El mediapunta golpeó una falta desde la frontal del área que se marchó fuera por muy poco de la meta defendida por el reaparecido Dani Jiménez. Un disparo lejano del visitante Poveda atrapado por Lolo cerró el capítulo de ocasiones de la primera parte.

Luismi Álvarez no realizó sustituciones al paso por los vestuarios, pero sí salieron entonados los locales a la reanudación. El omnipresente Platero probó fortuna con un golpeo desde la frontal que no cogió puerta. El paso de los minutos favoreció el asentamiento de un Leganés nuevamente letal a balón parado.

Otra falta colgada al área por Djouahra, esta vez desde el cuadrante derecho de la parcela ancha, encontró un remate más convencional del central canterano Lalo con el pie a la red ante la mala salida de Lolo en el minuto 62. Luismi Álvarez ejecutó tres sustituciones juntas a renglón seguido de recibir el mazazo de la segunda diana. Dani Martínez, Eric y Gustavo relevaron a Laerte y a los amonestados Mario Tomé y Pablo Guerrero. Por su parte, el entrenador visitante, Borja Jiménez, dio entrada a Naim por el pulmón Cissé.

El Leganés, con la competición liguera en mente, se limitó a gestionar el paso de los minutos, mientras que el Llerenense tiró de honor y de cierto empuje para, al menos, conseguir el tanto del recorte de distancias que finalmente no se produjo. La segunda participación del Llerenense en la Copa del Rey tuvo el mismo desenlace que la primera (1979-80): derrota ante otro equipo madrileño y sin marcar gol.

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