Luis Garraín Villa
Lunes, 9 de septiembre 2024, 20:54
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Fue durante la segunda mitad del siglo XIII cuando la población de Llerena comenzó a experimentar un creciente desarrollo. Tras la reconquista y a partir de que los maestres de la Orden Militar de Santiago la eligieran como su residencia temporal, fue el centro de sus principales operaciones militares y administrativas.
En la segunda década de la centuria del XVI, con el inicio del significativo crecimiento de la entonces villa llerenense y en aquel ambiente de expansión, vino al mundo uno de los personajes más importantes que Extremadura dio para la historia, el llamado 'Príncipe de los cronistas de Indias', Pedro Cieza de León.
Pedro, cuando tenía 17 años, embarcó desde Sevilla hacia Santo Domingo, el día 3 de junio de 1535, según consta en el libro de inscripción de pasajeros custodiado en el Archivo de Indias: «Pedro de León, hijo de Lope de León y Leonor de Cazalla, vecinos de Llerena, pasó a Santo Domingo, en la nao de Manuel de Maya, juraron por él Alonso López y Luis de Torres, que lo conocen e que no es de los prohibidos».
La mejor biografía de Cieza de León en su andadura por el Nuevo Continente la podemos encontrar en su producción literaria como cronista, trabajo que alternó como miembro de las huestes españolas, como él mismo reconocía diciendo: «… pues muchas veces cuando los otros soldados descansaban, cansaba yo escribiendo».
Pasó 15 años recorriendo el continente suramericano, desde Panamá hasta Perú, pasando por la actual Colombia, Venezuela y Ecuador e intervino en la fundación de varias ciudades, entre ellas Anserma, también llamada Santa Ana de los Caballeros (1539), Cartago (1540), y Santa Fe de Antioquía (1541).
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